Los amigos de Iñigo Cabacas mantienen su versión ante la juez
En su declaración como testigos de la acusación consideran que la Ertzaintza se empleó con una violencia desproporcionada
Los primeros testigos ya han empezado a pasar por las dependencias del juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao, el encargado de esclarecer en qué circunstancias se produjo la muerte de Iñigo Cabacas. Ayer les tocó declarar a dos amigos del joven de 28 años al que mató una pelota de goma disparada por la Ertzaintza hace ya más de dos meses. Ambos estaban con 'Pitu' aquella noche fatal celebrando el triunfo del Athletic frente al Schalke 04, y ambos se han reafirmado en el relato de los hechos que vienen manteniendo desde el primer momento.
Esto es, que el pasado Jueves Santo (día 5 de abril) sobre las 23.30 horas la cuadrilla se encontraba en el callejón de la calle María Díaz de Haro, en Bilbao, junto a la herriko taberna. Allí se produjo una pelea entre dos desconocidos a la que no prestaron demasiada atención y al cabo de un tiempo llegaron al lugar varias furgonetas de la Ertzaintza. En un momento dado, comenzaron a disparar pelotas de goma en una actuación que los testigos de la acusación consideran desproporcionada. También se produjo el lanzamiento de varios objetos contra los uniformados por parte de algunas de las personas concentradas en el callejón. Iñigo Cabacas cayó mortalmente herido y acabó falleciendo cuatro días después en el hospital de Basurto.
Ya la semana pasada los forenses confirmaron en sede judicial que la causa del fallecimiento había sido, sin ningún género de dudas, el impacto de una pelota de goma.
En este momento procesal, la instructora del caso lo que pretende es esclarecer lo ocurrido para que las partes puedan determinar el tipo penal aplicable y, en un futuro juicio, depurar responsabilidades ya sea entre quienes dispararon o quienes dieron la orden de hacerlo. La versión de la Ertzaintza es que los agentes trataron de dispersar a la multitud para dejar el paso libre a los servicios médicos, ya que una llamada había alertado de que al menos una persona estaba herida en el callejón.
Según la previsión de la abogada de la familia, Jone Goirizelaia, la instrucción será larga ya que pasarán decenas de testigos por sede judicial y se practicarán varias periciales. De momento, hay señalamientos hasta mediados de julio.
Los primeros testigos ya han empezado a pasar por las dependencias del juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao, el encargado de esclarecer en qué circunstancias se produjo la muerte de Iñigo Cabacas. Ayer les tocó declarar a dos amigos del joven de 28 años al que mató una pelota de goma disparada por la Ertzaintza hace ya más de dos meses. Ambos estaban con 'Pitu' aquella noche fatal celebrando el triunfo del Athletic frente al Schalke 04, y ambos se han reafirmado en el relato de los hechos que vienen manteniendo desde el primer momento.
Esto es, que el pasado Jueves Santo (día 5 de abril) sobre las 23.30 horas la cuadrilla se encontraba en el callejón de la calle María Díaz de Haro, en Bilbao, junto a la herriko taberna. Allí se produjo una pelea entre dos desconocidos a la que no prestaron demasiada atención y al cabo de un tiempo llegaron al lugar varias furgonetas de la Ertzaintza. En un momento dado, comenzaron a disparar pelotas de goma en una actuación que los testigos de la acusación consideran desproporcionada. También se produjo el lanzamiento de varios objetos contra los uniformados por parte de algunas de las personas concentradas en el callejón. Iñigo Cabacas cayó mortalmente herido y acabó falleciendo cuatro días después en el hospital de Basurto.
Ya la semana pasada los forenses confirmaron en sede judicial que la causa del fallecimiento había sido, sin ningún género de dudas, el impacto de una pelota de goma.
En este momento procesal, la instructora del caso lo que pretende es esclarecer lo ocurrido para que las partes puedan determinar el tipo penal aplicable y, en un futuro juicio, depurar responsabilidades ya sea entre quienes dispararon o quienes dieron la orden de hacerlo. La versión de la Ertzaintza es que los agentes trataron de dispersar a la multitud para dejar el paso libre a los servicios médicos, ya que una llamada había alertado de que al menos una persona estaba herida en el callejón.
Según la previsión de la abogada de la familia, Jone Goirizelaia, la instrucción será larga ya que pasarán decenas de testigos por sede judicial y se practicarán varias periciales. De momento, hay señalamientos hasta mediados de julio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario