El asesinato del joven negro Michael Brown por un policía blanco en Ferguson- Missouri (EEUU) ha provocado una serie de disturbios entre la población y la policía.
El 9 de agosto, Michael entró en una tienda a robar y nada más salir a la calle, el policía Darren Wilson le disparó por la espalda seis tiros, según la autopsia. Según testigos, el joven había levantado las manos en señal de rendición y el policía abrió fuego.
Es, sin duda, un conflicto racial en el que la mayoría de la población, que es negra, se siente oprimida y discriminada y se le señala constantemente como sospechosos y potenciales delincuentes.
La policía despliega todo su arsenal contra la multitud que se manifiesta pacífica y desarmada, utilizando gases lacrimógenos, pelotas de goma y perros en un intento de dispersar la protesta. Los periodistas han sufrido también la censura como se puede apreciar en los diferentes vídeos que circulan por la red.
Pasados unos días de este asesinato, en Saint Louis, un joven también afroamericano de 23 años es asesinado por la policía en similares circunstancias por lo que los ánimos no se calman.
Vamos a poner unos ejemplos de las brutales prácticas policiales.
Michael Brown robando en la tienda:
Michael Brown yace en la calle muerto y la multitud permanece en el lugar de los hechos hasta que comienzan los disturbios. La comunidad de YouTube ha identificado este contenido como potencialmente ofensivo o inadecuado. Advertimos que el contenido de este vídeo puede herir la sensibilidad de algunos espectadores:
Uso de pelotas de goma y gases lacrimógenos:
Represión policial a los medios de comunicación:
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